2. Ciclado del acuario: Antes de agregar peces al acuario, es crucial ciclarlo correctamente para establecer una colonia de bacterias beneficiosas que procesen los desechos de los peces. Esto puede llevar varias semanas, pero es un paso fundamental para evitar problemas de calidad del agua y estrés en los peces.
3. Mantenimiento regular: Dedica tiempo cada semana para realizar tareas de mantenimiento en el acuario, como cambios parciales de agua, limpieza del sustrato, poda de plantas y limpieza de los cristales. Esto ayuda a mantener los niveles de amoníaco, nitritos y nitratos bajo control, creando un ambiente saludable para los peces.
4. Alimentación adecuada: Alimenta a tus peces con una dieta equilibrada y variada, evitando el exceso de comida que pueda contaminar el agua. Observa los hábitos alimenticios de tus peces y ajusta la cantidad de alimento según sea necesario. Recuerda que los peces también disfrutan de la alimentación enriquecedora, como los alimentos vivos o congelados.